"Todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los he creado, los formé y los hice" Isaías 43:7



lunes, 26 de septiembre de 2011

Las plagas de Egipto : El señorío de Jehová.


La trama o tema central de los caps. 7-11 de Éxodo,  trata de los eventos que llevaron a la liberación del pueblo. Simultáneamente, en una forma magistral, se desarrollaron tres tramas secundarias que aumentan el drama de los encuentros y ayudan a mantener el interés en el relato:
  1. El conflicto entre Jehová  y los dioses (o la teología) de los egipcios. Fue más bien una confrontación teológica y no tanto una demostración de poder divino.
  2. El cambio de actitud de los líderes egipcios hacia Jehová  y su siervo Moisés. De despreciarlos, ponerlos en ridículo y divertirse con ellos, poco a poco fueron llegando a tomar en serio a Moisés y a la autoridad de Jehová .
  3. La presión constante de faraón para negociar con Moisés para reducir las demandas de Jehová . El egipcio buscó un arreglo con Moisés para no perder su prestigio ni a Israel. Quiso regatear con Dios. En todo esto se ve a Dios ablandando el corazón endurecido de un tirano cruel.

Se ha hecho notar que las primeras nueve plagas vinieron en tres ciclos de tres plagas cada uno. La primera, la cuarta y la séptima vinieron después de una advertencia hecha por Moisés al faraón en encuentros al aire libre. El segundo ciclo, o sean la segunda, quinta, y octava plagas, vino después de advertencias en encuentros con faraón en el interior del palacio. La tercera, sexta, y novena plagas vinieron sin aviso previo. En la siguiente tabla se ilustran los ciclos:

Primer ciclo (Advertencia fuera de palacio)

1.     Sangre
4.     Moscas
7.     Granizo

Segundo ciclo (Advertencia en palacio)

3.     Ranas
5.     Ganado
8.     Langostas

Tercer ciclo (Sin advertencia)l

3.     Piojos
6.     Ulceras
9.     Tinieblas

En el esquema se nota el crecimiento dramático de la intensidad de las plagas: Comienzan como molestias; progresivamente, por la terquedad del faraón, afectan la vida económica del país, y finalmente vienen las tinieblas, el preludio a la muerte de los primogénitos de los egipcios.

En el Antiguo Testamento hay listas de las plagas también en Job 78:43-51 y Salmos 105:28-36; sin embargo, no concuerdan en todo con los detalles que se dan en Éxodo. Ninguna explicación de las diferencias presentadas hasta ahora es completamente satisfactoria. Posiblemente la respuesta está en reconocer el estilo poético de los Salmos, que procura más bien el ritmo para acompañar la verdad teológica presentada en vez de seguir el orden estrictamente cronológico de Éxodo.

En cuanto al Nuevo Testamento, hay referencias a las plagas solamente en Apocalipsis 8 y 16. Aquí también se encuentran en una forma modificada. En Apocalipsis 16 se trata de siete copas de juicios, y se repite la frase pero no se arrepintieron (Ap. 16:9, 11) como un recuerdo de la resistencia obstinada del faraón a la obra de Jehová . Con la literatura apocalíptica vale la pena recordar el significado hebraico de los números. Estos juegan un papel importante en lo que un autor inspirado quiere enseñar. El uso teológico de los números a veces puede explicar la razón de las modificaciones encontradas en los textos: Tres es el símbolo de deidad; cuatro representa el mundo; seis es el número de la maldad o lo imperfecto; siete es el número perfecto; diez representa lo completo; y doce es el número ideal.
Los egipcios y los cananeos consideraban la creación unida inextricablemente con la naturaleza de sus dioses. Israel veía la naturaleza como la creación de Dios. Así pues, los hebreos evitaban el peligro del panteísmo, el cual iguala a Dios y la creación, y el deísmo, que niega el control de Dios sobre el mundo que ha creado. Las Escrituras enseñan que Jehová  mantiene su señorío sobre la historia y la creación. Las plagas (mejor entendidas en Éxodo como “aflicciones” en vez de "enfermedades”) son demostraciones de esto y reflejan claramente el conflicto teológico entre la fe bíblica y la egipcia.

Las siguientes características de las creencias egipcias muestran la diferencia entre el concepto de Dios en el Antiguo Testamento y el que tenían los egipcios:
  1. Los egipcios consideraban al faraón como un dios poseedor de poderes sobrenaturales. Lo identificaban con Horus, el señor de los cielos, en su autoridad absoluta, y con Re, el dios del sol —el dios creador—, en su poder.
  2. Con el clima prácticamente sin lluvia, el río Nilo era lo que hacía posible la vida. Consecuentemente, los egipcios lo veían como la fuente de su existencia y lo hacían objeto de adoración.
  3. Además, los egipcios reverenciaban toda vida animal (incluyendo los insectos). La veían como algo sobrehumano y la deificaban.

Las plagas fueron actos justicieros contra todos los dioses de Egipto (12:12b): fueron más que simples juicios contra un rey obstinado. Sin embargo, las señales y prodigios (v. 3) atacaron la teología errónea de los egipcios acerca del faraón como un ser divino, de las creencias acerca del sol y del río Nilo y de la reverencia (deificación) de toda vida animal. Las plagas fueron demostraciones históricas de la soberanía de Jehová  sobre la historia, sobre la creación y sobre todos los hombres.

Se ha sugerido que las plagas descritas en Éxodo pueden estar relacionadas con una serie de fenómenos naturales las cuales pueden haber ocurrido en el antiguo Egipto. Por ejemplo, el transformar las aguas del Nilo en sangre puede ser considerado como una rara crecida del río en el mes de julio y agosto. El río llega a ser “como sangre” debido a la presencia de tierra roja arrastrada en suspensión desde las cuencas del Nilo Azul y el Atbara. Sin embargo, semejante explicación no aclara la presencia de semejante “sangre” en los valdes de madera y en la vasijas de piedra en toda la tierra de Egipto (7:19). Tampoco aclara la primera señal que Moisés hizo en presencia de los israelitas (4:30), o aquellas ejecutas por los magos egipcios (7:22). Aún más, el texto enfatiza la fuente divina de tales eventos.

Mientras los 11 episodios en 7:8–11:10 tienen la misma forma básica, cada uno contribuye algo distinto a la totalidad de la historia.

7:8–13 La vara se transforma en serpiente. Es interesante que la confrontación entre Moisés y el faraón comienza con el rey egipcio demandando señales  (4:21; 7:3); la misma palabra heb. se traduce “maravillas” y “prodigios” en 11:9, 10. Obviamente, el faraón estaba convencido de que en una demostración de fortaleza él tenía el poder, a través de sus hechiceros, para vencer a Moisés. Aun mientras ellos fueron suficientemente poderosos para reproducir la señal de la vara de Aarón transformada en una serpiente, su poder fue menor; la vara de Aarón se tragó las varas de ellos (12).

7:14–25 El agua se transforma en sangre. Por medio de una cuádruple repetición de los detalles asociados con el agua transformada en sangre, el relato destaca la extensión y la seriedad del prodigio ejecutado juntamente por Moisés y Aarón: Hubo sangre en toda la tierra de Egipto (21).

8:1–15 La plaga de las ranas. La solicitud del faraón a Moisés (rogad a Jehová para que quite las ranas de mí y de mi pueblo) introduce en esta sección un tema que será recurrente en otros episodios. El faraón reconoció la capacidad de Moisés de mediar con Dios para la restauración de las condiciones normales en Egipto (8:28–31; 9:28, 29, 33; 10:17, 18).

8:16–19. El polvo se convierte en piojos. Abreviando la forma de presentación encontrada en otros episodios, esta breve sección se centra en la reacción de los magos egipcios a la plaga de los piojos. Incapaces de duplicar lo realizado por Moisés, admitieron ante el faraón: ¡Esto es el dedo de Dios! (19)

8:20–32 La plaga de las moscas. En este episodio se da a una detallada atención a la negociación entre el faraón y Moisés sobre dónde los israelitas podían sacrificar a su Dios. El relato destaca la falsedad de faraón en que una vez que Moisés había orado a su favor él se negó a permitir que el pueblo fuera. Similar falsedad se revela en 9:34 y 10:16, 17.

9:1–7 La muerte del ganado. El hecho característico de esta sección es la distinción que fue trazada entre israelitas y egipcios. La plaga que vino sobre el ganado trajo muerte sólo a los animales egipcios: de los hijos de Israel no había muerto ni un solo animal (7).

9:8–12 La plaga de las úlceras. Este corto episodio se asemeja mucho a 8:16–19. Llega a su clímax en el comentario que los magos egipcios no pudieron permanecer en la presencia de Moisés. Si bien, inicialmente, habían sido capaces de desafiar a Moisés y Aarón, ahora los magos se encontraban a sí mismos débiles e impotentes ante estos prodigios milagrosos.

9:13-35 La plaga del granizo. En contraste con el episodio anterior éste es mucho más detallado. A través de referencias repetidas a “Jehová”, el relato se centra en su divino poder. Se nos recuerda que Moisés fue sólo un agente de Dios y que el propósito de los diferentes prodigios fue el de demostrar el poder soberano de Dios.

10:1–20 La plaga de las langostas. El hecho más notable en este episodio es la actitud de los funcionarios del faraón. Después que Moisés anunció el envío de langostas, ellos inmediatamente trataron de persuadir al faraón de que reconsiderara su posición. A estas alturas, los funcionarios estaban convencidos de lo absurdo de detener a los israelitas de ir y adorar a su Dios. Sin embargo, el faraón estaba preparado para dejar ir sólo a los varones; las mujeres y los niños deberían quedarse. Aparte de un breve comentario en 9:20, 21, ésta es la primera indicación de una discrepancia entre la actitud del faraón y la de sus siervos hacia los israelitas.

10:21–29 La plaga de las tinieblas. El hecho más distintivo de este episodio es su conclusión. La referencia al endurecimiento del corazón del faraón indica el fin de casi todos los otros episodios, pero no de éste. Se agregan varios versículos que llaman la atención a una nueva etapa en la trama. Mientras que los otros episodios concluyen con Moisés habiendo ya abandonado al faraón, el mandato que Moisés debe retirarse (28) revela que él estaba aún en la presencia del faraón. El relato también destaca, como no ocurre en otro lugar, el profundo odio del faraón hacia Moisés; si Moisés aparecía nuevamente ante él, de cierto que moriría. Con este clímax, la escena está preparada para el episodio final en la serie.

11:1–10 Se anuncia la muerte de los primogénitos. Mientras aún se encontraba en la presencia del faraón, Moisés recibió una nueva revelación de parte de Dios. Habría una última plaga que causaría que el faraón dejara ir al pueblo. Moisés anunció inmediatamente la plaga al faraón: todo primogénito en la tierra de Egipto morirá (5). Con este pronunciamiento final, Moisés dejó la presencia de faraón muy enojado. Como consecuencia de la renuencia del faraón para escuchar, Egipto experimentaría uno de los más terribles ejemplos del poder de Dios. Después de esto los israelitas saldrían. Si bien el v. 10 marca el fin de un ciclo de episodios que comenzaron en 7:8, nuevas etapas en la trama se anticipan en este episodio final.

viernes, 19 de agosto de 2011

LA FIESTA DE LOS TABERNÁCULOS

La fiesta de los tabernáculos (sukkot) (Lv. 23:33-44)

  1. La fiesta de los tabernáculos, se realiza cinco días después de Yom Kippur y es la última de las siete fiestas del Señor. Tal como la primera, cae en el día 15 del mes, y, con esto, en luna llena. O sea, que se ubica justo seis meses entre Pessaj, la fiesta de los panes sin leudar, en primavera, y la fiesta de los tabernáculos, en otoño, ambas de 7 días de duración.
  2. En primer lugar, debía de ser otra fiesta de agradecimiento por las cosechas, pues justo cae en otoño, en el tiempo en que se recogen los últimos frutos antes de las grandes lluvias del invierno (v. 39).
  3. En segundo lugar, debía ser un memorial de cuando Dios había guiado a Israel fuera de Egipto, liberándolos de la esclavitud de Faraón, y de cuando los Israelitas habían vivido 40 años en tiendas o en carpas. Por eso, cada año, durante los siete días de celebración, debían vivir en carpas, para que su descendencia no olvidara la gran obra de Dios.
  4. En tercer lugar, es una fiesta de gozo. Es la única de las siete fiestas, en la cual Dios le mandó expresamente a Su pueblo que se regocije ante el Señor (v. 40); esto significa estar gozosos ante Dios por la bendición de la cosecha, el trabajo realizado y por la liberación. De esta alegría debía participar todo el pueblo (Dt 12:7;12;18).
  5. Proféticamente, esta fiesta nos remite hacia el venidero reino de Dios sobre la tierra, cuando el viejo Faraón, Satanás, estará atado y los redimidos en Cristo habrán resucitado e ingresado en el reino de Dios. Recién entonces habrá motivo de imperturbable y absoluta alegría.
  6. Los cuatro días entre Yom Kippur y la fiesta de los tabernáculos, simbólicamente, señalan que con el regreso de Cristo con gran poder y gloria, no comenzará enseguida el reino de paz, sino que antes, el Anticristo y su ejército han de ser aniquilados (Ap 19:19-21).
  7. Entonces, se llevará a cabo el juicio de las naciones, en el cual se decidirá cuáles de ellas, de las que han sobrevivido a los 42 meses del poderío del Anticristo, entrarán al reino de Dios y cuáles no (Mt 25:31-46).
  8. Al hecho de que la muerte y resurrección de Jesús, y el subsiguiente derramamiento del Espíritu Santo, ocurrieron justamente en uno de los días de fiesta, se puede suponer que los últimos siete años (la semana 70 de Daniel) comiencen con Rosh-Hashaná, o el día de las trompetas, y que el regreso de Jesús, en gran poder y gloria, junto a su esposa, para el establecimiento de su reino, siete años más tarde, probablemente ocurra en el día de Yom Kippur.
  9. Naturalmente, no sabemos en que año ocurrirá esto. Pero a nosotros, quienes conocemos y creemos en su Palabra, esto nos debe alentar y estimular a estar preparados, como ya lo dijo Pedro en su segunda epístola: "...¡cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios... " (2 Pedro 3:11-12).
Conclusiones.

  1. Las siete fiestas celebradas representan para el cristiano:
·        La pascua: significa nuestra libertad del Egipto donde antes vivíamos como esclavos del pecado.
·        Panes sin levadura: la separación radical del mundo pecaminoso.
·        Primeras gavillas: representa que Dios es el dueño de todo y por lo tanto debemos ponerlo a Él en el primero lugar (Mt. 6:33)
·        Pentecostés o fiesta de los primeros panes.
a) La primicia de la cosecha: La venida del Espíritu Santo (Hch. 2:1-4).
b) La fiesta de Pentecostés: La gran cosecha de Dios (Hch. 2:36-42).
·        El día de las trompetas: la venida de Cristo por su iglesia
·        Fiesta de reconciliación: la representación de Jesús como el sacrificio perfecto por nuestros pecados y nuestro gran sumo sacerdote.
·        Fiesta de los tabernáculos: Jesús nuestra habitación y nosotros la habitación de Jesús.
  1. Recordemos que los judíos no tenían nombres para los días, solo los llamaban como el día primero, día segundo, y así sucesivamente. Miremos pues los siguiente:
·        La pascua se celebra el día 14 del mes de Abib. Día de reposo para los judíos.
·        La fiesta de los panes sin levadura duraba siete días, desde el día 15 hasta el día 21
·        Sin embargo, la fiesta de las gavillas, que representa la iglesia, caía el día 22 del mes, un día después del día de reposo.
·        Para la fiesta de Pentecostés, se contaban 50 días a partir del día 22 del mes de Abib, y esta fiesta cae un día después del día de reposo.
·        La fiesta de las trompetas se celebraba el 1º día del 7º mes
·        La fiesta de la reconciliación se celebraba el 10º día del mismo mes y era constituido como día de reposo nacional (Lv. 16:31)
·        La fiesta de los tabernáculos se celebraba el día 15 del 7º mes. Un día después del día de reposo.

LA FIESTA DE LA RECONCILIACIÓN

Fiesta de la reconciliación (Yom-Kippur). (Lv. 23:26-32; 16:1-34)

  1. En Lv. 23: 26-32 , no se dan muchas instrucciones para el sacerdote de cómo se debían celebrar la fiesta, porque en esta se dan las instrucciones para el pueblo. Las instrucciones sacerdotales las encontramos en Lv. 16.
  2. Lv. 16:1 es una referencia a la muerte de Nadad y Abiú.
  3. Este era el principal de todos los días en que se hacían sacrificios y el único día  en el año en el cual el sumo sacerdote podía ingresar al lugar santísimo, para reconciliarse a sí mismo y al pueblo con Dios (Lv. 16:2,34).
  4. La descripción de los animales necesarios para el sacrificio y la vestidura del sacerdote, para cumplir con la ceremonia la encontramos en los vs. 3-5
·        Para Aarón, la ofrenda será un novillo y un carnero (v. 3).
·        La ofrenda para la congregación incluye dos machos cabríos y un novillo (v. 5).
·        La vestidura para esta ocasión era vestidos muy sencillos en vez de la vestidura normal para el sumo sacerdote (Ex. 28). La razón es que estaba entrando directamente en la presencia de Jehová. Por esto, se vistió en manera más humilde.
·        Antes de vestirse tenía que lavarse (v. 4). Cada vez que se cambiaba la vestidura tenía que bañarse (vs. 4, 24, 26, 28).
  1. El procedimiento de la ceremonia lo encontramos en los vs. 6-10
·        Primero se ofrece el sacrificio por el propio sacerdote y por casa (v. 6)
·        Luego debe echar suertes sobre los dos machos cabríos para determinar cuál será el sacrificio muerto y cuál será suelto en el desierto (vs. 7-8).
·        Luego, venía el sacrificio del macho cabrío para la purificación (v. 9).
·        Después enviaría el macho cabrío al desierto para Azazel (v. 10).
  1. Los detalles del ceremonial son relatados en los vs. 11-28
·        Los vs. 11-19 hablan del sacrificio.
·        Los vs. 16, 19 y 20 enfatizan que el propósito del ceremonial era limpiar el santuario y el altar de las impurezas de los hijos de Israel.
·        Después de la purificación del santuario y el altar, el macho cabrío vivo sería enviado al desierto. Es el símbolo de la limpieza de sus pecados vs. 20-22
·        Los vs. 23-28 presentan los sacrificios y las limpiezas finales.
  1. Los vs. 29-34 son un resumen que habla de la responsabilidad del pueblo en el cumplimiento de este día de la Expiación.
·        Esta celebración será perpetua. Designa el día: El décimo día del mes séptimo (v. 29)
·        Os humillaréis a vosotros mismos (v. 29) es la frase hebrea “afligiréis vuestra alma”. Es un dicho que indica humillación del corazón. Posiblemente Heb 10:22-25 es una referencia a este concepto.
·        El sacerdote que haya sido ungido (v. 32) es el sumo sacerdote. El presenta este sacrificio cada año.

Explicación de algunos términos.

  1. Azazel. Este término ha generado muchas polémicas por sus raíces. En general hay dos corrientes de interpretación que vamos a estudiar:
·        Algunos creen que la palabra Azazel viene de las dos palabras hebreas: ‘ez (“chivo”) y ‘azal (“soltar”, “apagar”), así la traducción azazel  , “chivo que desaparece”. La interpretación más común es que es una referencia a un ser, un espíritu. El pasaje dice, para Azazel (vs. 8, 9, 26). En el v. 8 aparece en contraste a Jehová: uno para Jehová y el otro para Azazel. Entonces, la idea sería que los pecados son enviados al espíritu de su origen y desaparecen en el desierto. El problema con esto es que la Biblia condena el sacrificio a los espíritus.
·        Una tradición hebrea es que Azazel es un lugar en el desierto. Dicen que viene de las palabras ‘azaz  (“ser fuerte”) y ‘el  (“poderoso”). Así, sería la referencia a un lugar en las montañas, un precipicio. Dice que el macho cabrío está echado del precipicio a su destrucción. Así tiene la idea de destrucción. Esta interpretación dice que para Azazel quiere decir, “para destrucción”.
·        Cualquiera que sea la interpretación, la idea es que los pecados son echados fuera y desaparecen. Es la misma idea que se encuentra en Mi. 7:19, que dice que Jehová ...echará nuestros pecados en las profundidades del mar. Para los hebreos el desierto y el mar eran lugares grandes y desconocidos. Las cosas echadas en el desierto y en el mar estaban perdidas.
·        El Nuevo Testamento no compara el macho cabrío con Cristo. Sin embargo, la idea de hacer la comparación aparece temprano en la literatura cristiana. El símbolo tiene valor. Como el macho cabrío fue enviado al desierto cargado con el pecado del pueblo, así Cristo murió fuera de Jerusalén por los pecados de su pueblo.
  1. El sumo sacerdote.
·        La palabra “sumo sacerdote” no aparece en el libro de Levítico. Ungido es la designación aquí para el sumo sacerdote.
·        Cristo es el “ungido” de Dios, nuestro sumo sacerdote. “Mesías” es la palabra hebrea para “ungido” y “Cristo” es la traducción de la misma al griego.

Significado profético para la iglesia.

  1. Los nueve días entre la fiesta de las trompetas (Rosh Hashana) y el día de expiación son llamados "Yamim Noraim" o "días terribles". Se trata de un tiempo de arrepentimiento y humillación para poder, al décimo día, presentarse purificado delante de Dios. Con el correr de los siglos, se han desarrollado, en relación a esto, tradiciones religiosas adicionales.
  2. En los capítulos 8, 9 y 10 de la carta a los Hebreos, se nos describe gráficamente de qué manera tenemos en Jesús, un sacrificio de expiación consumado, y cómo Él con Su propia sangre, ingresó como sumo sacerdote celestial, al célico lugar santo, para reconciliarnos con Dios. En Hebreos 9:24 dice: "Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios.”
  3. El escenario completo de Azazel donde el carnero fue llevado al desierto es simbólico de la muerte de Jesús fuera del campamento, y después habiéndose llevado los pecados fuera del campamento para siempre. En vez de un hombre o mujer de Israel siendo castigado fuera del campamento, Jesús fue afuera, para que aquellos que lo reciben puedan permanecer dentro del campamento eternamente con Dios. Jesús cumplió la parte del cordero expiatorio de Azazel de la ceremonia, después de la temporada de Pascua. Jesús de hecho fue liberado por Pilatos y era en ese punto un hombre libre. Pero la voz del pueblo prevaleció y Azazel no fue realmente puesto en libertad. Era todo parte del plan de Dios para proveer a Jesús como ambos "el cordero para Jehová" o el sacrificio que había sido el Azazel declarado libre por Pilatos. Sin embargo, hay otra dimensión de esta verdad de Jesús siendo el total cumplimiento de sacrificio a Jehová y de Azazel. Después de Su resurrección El caminó fuera de la sepultura y fue permanentemente liberado para ser predicado y vivir libremente en el desierto de las naciones de la tierra. El sacrifico anual de Yom Kippur en Lv 16 eran vicarios. Sacrificios vicarios son la médula y espina dorsal virtual de las leyes, decretos y juicios de la Dios.
  4. Esta parte del Yom Kippur se ha cumplido a través de Jesús, pero el regreso del lugar santo celestial del Sumo Sacerdote verdadero, Jesucristo, aún está pendiente. Para quienes creemos en Jesús nos es claro que Su sacrificio fue agradable delante de Dios, y que a su debido tiempo regresará del lugar santo celestial para confirmar ante el mundo visible e invisible, que Su sacrificio ha sido aceptado por Dios, obteniendo así, expiación por los pecados de toda la humanidad. ¡Eso ocurrirá cuando regrese con gran poder y gloria como Rey de reyes y Señor de señores! Entonces, todos los que en Él esperan, doblarán sus rodillas ante Él para gloria de Dios Padre, tal como los israelitas que, cuando el sumo sacerdote volvía del lugar santísimo, se postraban en reverencia, sobre sus rostros, ante Dios.
  5. En la fiesta de Yom Kippur el énfasis de las ceremonias se encontraba sobre el arrepentimiento del pecado. Tres veces se menciona en Levítico 23:26-32, que aquel que no se humilla y se arrepiente delante de Dios, sería quitado de entremedio del pueblo. En Mateo 3, Juan el Bautista, sin piedad, llama al pueblo al arrepentimiento, y dice en el versículo 8: “Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento.” En forma similar, Jesús proclamaba, en Lucas 13:7: “He aquí, hace tres años que vengo a buscar fruto en esta higuera, y no lo hallo; córtala.” Cuan rigurosas eran las palabras de Jesús lo vemos, con demasiada claridad, en la historia de Israel. No obstante, el mensaje del arrepentimiento también va para cada uno de nosotros, tal como el mensaje de Yom Kippur de aquel entonces, tenía también un aspecto personal: “Porque toda persona que no se afligiere en este mismo día, será cortada de su pueblo" (Lv. 23:29).

EL DÍA DE LAS TROMPETAS

El día de las trompetas. (Yom Teruah). (Lv. 23:23-25)

  1. De las siete fiestas del Señor, la quinta es, probablemente, la más enigmática. Mientras que en las demás se explica el por qué y para qué, esto no ocurre en la quinta fiesta. Debe ser por eso que después de la destrucción del templo, este día pasó a ser Rosh-Hashana, lo cual significa fiesta de año nuevo, para así darle un significado.
  2. La primera fiesta del otoño es la fiesta de las Trompetas. Hay tres fiestas del otoño. Todas éstas fueron celebradas en el séptimo mes. El primer día del mes (entre septiembre y octubre) celebraron la fiesta de las trompetas, como un día sabático (v. 24). Este día introduce el séptimo mes con sus actividades rituales de tanta importancia. Parece que existía un calendario civil tanto como este calendario religioso. En el calendario civil la fiesta de las trompetas comenzó el año. Así es en el calendario de los judíos hoy en día.
  3. Introduce las tres fiestas del otoño que, proféticamente, hacen alusión de los tiempos finales y simbolizan el comienzo del reino de Dios.

Cumplimiento en el Nuevo Testamento.

  1. El son de las trompetas representaba la predicación del evangelio, con que se llama a los hombres a arrepentirse del pecado y a aceptar la salvación de Cristo, que era significada por el día de la expiación. Además, invitaba a gozarse en Dios y a hacerse extranjeros y peregrinos en la tierra, lo cual denotaba la fiesta de los tabernáculos, observada el mismo mes. Al comenzar el año, el sonido de trompeta llamaba a sacudir la pereza espiritual, a examinar y probar sus caminos y enmendarlos.
  2. ¿Pero cuál es el significado profético de este misterioso día de trompetas? Casi todos los profetas del Antiguo Testamento han profetizado este gran y terrible día del Señor, que según 2ª  P. 3:10 vendrá como ladrón en la noche (Sof. 1:14-16; Jl 2: 1-2).
  3. Es significativo que a este día tampoco se le denomina día de fiesta, sino día de conmemoración. No se anuncia ningún motivo de alegría o agradecimiento.
También es de destacar que es la única fiesta que cae el primer día de un mes, o sea, en luna nueva, en el cual la noche es oscura. Por el contrario, el Pessaj y la fiesta de los Tabernáculos caen el día 15 del mes, o sea en luna llena. Este simbolismo, seguramente, también nos quiere decir que aquí no se trata de algo iluminado sino de algo oscuro. Por otro lado, esto también explica porqué este día fue anunciado con tan pocas palabras.

LA FIESTA DE PENTECOSTÉS

La fiesta de Pentecostés o de los primeros panes (Shavouth) (Lv. 23:15-22)

  1. Como la ofrenda de la primicia al final de la celebración de los panes sin levadura representa el principio de la siega, así el Pentecostés es la celebración del fin de la estación de la siega.
  2. La fiesta no tiene nombre en este pasaje. En el Antiguo Testamento está designado por varios nombres.
·        La fiesta de las semanas (Ex. 34:22),
·        La fiesta de la siega (Ex. 23:16), y
·        El día de las primicias (Nm. 28:26).
  1. Es el único sacrificio que permitía pan con levadura.
  2. Esta fiesta se encuentra como un eslabón de unión entre las tres fiestas en la primavera y las tres fiestas en el otoño.
  3. En la actualidad, los judíos festejan este día como Fiesta de la Legislación en el Sinaí, ya que según la tradición pasaron cincuenta días entre el Éxodo de Egipto y la recepción de los mandamientos en el Sinaí.

Particularidades de la fiesta.

  1. Los dos panes con levadura representan la futura división de Israel en dos. En Hch. 2, vemos un remanente de israelitas de ambas casas morando en diversos lugares que se convierten en una sola ofrenda unida de las primicias del trigo, mediante la llenura del Espíritu Santo como sello de su fe. La levadura, prefigura el hecho que aunque redimidos por la preciosa sangre pascual de Jesús, las dos casas de Israel, todavía contienen grandes cantidades de levadura. De ambas casas, solo un remanente creyente (Ro. 11:5) llegaría a ser la nueva masa sin levadura del Nuevo Pacto en la mano de Jesús. (Ez. 37)

Importancia para la iglesia.

  1. La proyección de esta fiesta, en su cumplimiento en el Nuevo Testamento, la podemos ver de la siguiente manera:
·        La primicia de la cosecha: La venida del Espíritu Santo (Hch. 2:1-4).
·        La fiesta de Pentecostés: La gran cosecha de Dios (Hch. 2:36-42).
  1. La semilla del mensaje de salvación que Jesús presentó como la semilla de la Palabra de Dios, había traído su primer fruto. En un día, tras la predicación de Pedro, cerca de tres mil almas fueron agregadas a la iglesia neotestamentaria (Hch. 2:41), como Primicias de la nueva cosecha.
  2. El largo camino del grano de trigo desde la siembra hasta el rico pan (Jn. 12:24); el morir en la tierra, el nacer y crecer con lluvia y frío, el madurar en el sol y el calor; luego, el cortar y trillar, el clasificar y el moler, el amasar y el hornear en el calor del fuego, nos muestran, en forma plástica, las etapas de la vida de Jesús. Pero también ejemplifican las etapas en la vida de cada creyente, hasta que seamos agradables ante Dios, como los frescos panes, que emanan un olor agradable y que son mecidos delante de Dios. En verdad, esta es una imagen perfecta de la vida de santificación de aquellos que creen en Jesús. En Santiago 1:18 los creyentes, significativamente, son llamados Primicias de Sus Criaturas.
  3. Pero también el segundo aspecto de la celebración de la Legislación en el Sinaí se ha cumplido en forma perfecta. Justamente en el día en que Israel recordaba la legislación y el pacto en el Sinaí, Dios confirmó el Nuevo Pacto por medio del milagro del derramamiento del Espíritu Santo en forma de llamas de fuego, acompañadas por el rugido del viento y las voces en otras lenguas, lo cual produjo el asombro y el espanto de los presentes (Ex. 20:19; Hch. 2:6-7)
  4. En este contexto, es significativo que, al contrario que en el Sinaí, se escucharon muchas lenguas. El Nuevo Pacto y su mensaje, que fueron sellados en Pentecostés por el Espíritu Santo, es válido para todos los pueblos, lenguas y naciones, lo cual fue indicado por las muchas lenguas. Aquí es necesario enfatizar que no se trató de un vulgar hablar en lenguas, sino de un milagro extraordinario en el que cada cual podía comprender lo dicho en su propio idioma. Dicho sea de paso, esto también es una señal de que la maldición de la confusión de las lenguas es quitada por Cristo.
  5. Esta cuarta fiesta, que se encuentra, separadamente, entre las tres fiestas en la primavera y las tres en el otoño, es como un eslabón de unión entre el principio y el tiempo final, y hace referencia a la Iglesia de Jesús, la cual incorpora este eslabón de unión entre el Antiguo Pacto y el comienzo del Reino de Dios.

LA FIESTA DE LAS PRIMERAS GAVILLAS

La fiesta de las primeras gavillas (‛ômer). (Lv. 23:9-14)

  1. Hay una ofrenda de primicias en el día que sigue a la semana de Pascua. Esta representa el principio de la siega. Antes de disfrutar de la siega, tenía que ofrecer a Dios la primicia. La tierra y todo que produce pertenece a Dios. Dios requiere la primicia de sus productos. Con la ofrenda de manojo, ofrecieron el holocausto y la ofrenda vegetal.
  2. Hasta el día en que la primera gavilla de la nueva cosecha era llevada al santuario y mecida delante de Dios, en agradecimiento por la bendición de la nueva cosecha, no se podía comer de la misma (Lv. 23:14).
  3. Del grado de maduración del cereal dependía entonces la fijación de la fiesta del Pessaj. Ya que el calendario de fiestas, en el tiempo del segundo templo, se basaba en el calendario babilónico de la luna, y el año lunar solamente tiene 354 días, o sea 11 días menos que el año solar con sus 365 días, por lo menos cada 3 años se debía agregar un 13º mes. Los sacerdotes entonces decidían, según el grado de maduración de los cereales, si era necesario incluir un 13º mes o no.
  4. La fiesta caía en el día después del Shabbat (v 11), desde cuando se debían contar siete semanas hasta llegar nuevamente al día después del Shabbat, día en que caía la cuarta fiesta, el Shavouth o Pentecostés.

Algunas instrucciones específicas.

  1. La palabra “gavilla” es el término hebreo “‛âmar” que significa amontonar; figurativamente castigar (como si fuera apilando golpes); especialmente reunir grano.
  2. La ofrenda especifica por Dios era flor de harina amasada con aceite y vino.
·        De la flor de harina era dos décimas de efa. La efa equivalía a 22 litros. Entonces las dos décimas son 4.4 litros.
·        El vino era la cuarta parte de un hin. El hin equivalía a 3.7 litros. Entonces la ofrenda de vino era de 0.92 litros.

Cumplimiento en Jesús.

  1. De acuerdo a esto, no era ésta la fiesta de la primera espiga, o del primer trigo, sino de la primera gavilla, y se cumplió proféticamente, en su totalidad, en Jesús y en muchos santos que resucitaron con Él.
  2. Jesús resucitó justamente el primer día de la semana, el día después del Shabbat, siendo así el primero de entre los muertos, tal como Pablo lo dice en 1ª Co. 15:20
  3. Esta ley nos enseña a honrar al Señor con nuestra sustancia y con las primicias de nuestras ganancias, (Pr 3:9). Ellos no tenían que comer el maíz nuevo antes de ofrecer a Dios su parte; y nosotros siempre empezamos con Dios: empecemos cada día con Él, empecemos cada comida con Él, empecemos cada asunto y negocio con Él: buscad primero el reino de Dios.

LA FIESTA DE LOS PANES SIN LEVADURA

La fiesta de los panes sin levadura. (matstsâh) (Lv. 23:6-8; Ex. 12:14-20; 13:3-10)

  1. Generalmente no es festejada como una celebración separada sino juntamente con la pascua. Por siete días no se podía comer pan con levadura, desde la noche del 14 hasta el atardecer del 21 del primer mes (Éxodo 12:18).
  2. Técnicamente la pascua era una fiesta de tipo pastoral y la fiesta de los panes sin levadura era de tipo agrícola
  3. Las partes tienen enfoques diferentes: La Pascua era una fiesta familiar, mientras que la fiesta de los panes sin levadura era para la comunidad en asamblea (v. 16), o una fiesta de peregrinación.
  4. Específicamente, el pan sin levadura simbolizaba el éxodo real de Egipto (v. 17), mientras que la Pascua recalcaba más bien la liberación efectuada por medio de la plaga de muerte que azotó a los egipcios.
  5. Cuando aun no existía la levadura industrialmente producida, tenía que criar la levadura en la masa uno mismo. Y, por eso, siempre había una masa que había que trabajar, cada pocas horas, con la adición de harina y agua, incorporándole así oxígeno fresco para que la levadura, en dicha masa, pudiera reproducirse. Con una mitad se hacía pan fresco, añadiéndole harina y agua adicionales; la otra mitad seguía siendo trabajada cada pocas horas, para otra vez tener levadura para el próximo día. Este proceso continuado no podía ser realizado durante el rápido éxodo, y por eso debían comer pan sin levadura (Éxodo 12:39). Para conmemorar eso, ellos cada año, por una semana, debían comer pan sin levadura.
  6. El texto hebraico dice literalmente, Habréis de conmemorar este... (v. 14a; se entiende la palabra día). Lo que era el memorial no era el día, sino el quitar la levadura de las casas y la celebración abarcaba la semana entera.

El uso de la levadura en Biblia.

  1. La palabra “levadura” o “leudado”, en el Antiguo Testamento, se deriva de un verbo que quiere decir ser agrio. Y se usaba de manera literal.
  2. En el Nuevo Testamento se utiliza la palabra “zúme” que significa fermento (como hirviendo). Y se usa de las siguientes maneras:
·        Sentido metafórico:
a) De doctrina corrompida (Mt. 13:33; 16:6,11; Lc. 12:1)
b) De prácticas corrompidas (Mr. 8:15; 1ª Co. 5:7-8)
·        Sentido literal (Mt. 16:12) y en las afirmaciones generales de 1ª Co 5:6 y Gá 5.9, donde las aplicaciones implícitas son a prácticas y doctrinas corrompidas, respectivamente.

¿Qué nos dice eso, proféticamente, con respecto a Jesús, por medio de quien fuimos salvos?

  1. La levadura es usada como imagen de pecado y orgullo. Ahora Jesús fue el hombre más humilde sobre la tierra (Mt. 11:29; Fil. 2:8)
  2. El pan sin levadura es también llamado “pan de aflicción” (Dt. 16:3). Simboliza sometimiento y obediencia, lo que Jesús, para consumar nuestra salvación, vivió en forma perfecta hasta la muerte, y muerte de cruz.
  3. Para nosotros, que fuimos librados de la esclavitud del pecado por la sangre de Jesús -como los hijos de Israel en su tiempo por la sangre del cordero, de la esclavitud en Egipto-, la Fiesta de los Panes sin Levadura simboliza la separación radical del mundo pecaminoso. (Ex. 12:15; Heb 12:14)